El rescate de Chipre, un precedente para lo que se viene: no
serán los bancos los que paguen, sino sus depositantes
En una decisión sin precedentes, Chipre ha acordado con la
UE y el IMF pero imponiendo a sus depositantes un impuesto por única vez lo que
podría llamarse de confiscatorio.
ACTUALIZACIÓN: Los bancos seguirán cerrados hasta el jueves 21. Existe desacuerdo entre los partidos que conforman el Parlamento, se espera una ajustada votación.
La madrugada de este sábado -convenientemente luego del
cierre de los principales mercados mundiales- los ministros de finanzas de
Europa anunciaron que el rescate de Chipre, calculado en unos 10 mil millones
de euros, tendría una condición funesta: los depositantes del país (residentes o
no) tendrán que pagar por única vez un impuesto sobre sus depósitos. Considerando que el sector bancario es 5 veces el PBI del país, se espera recaudar 5,800 millones de euros.
Esta medida que podría dejar sin refugio seguro a los
depositantes de cualquier país en necesidades financieras, se aplicará desde el
próximo martes (considerando que el lunes es feriado en Chipre) y será el 6.75%
para aquellos depósitos menores a 100,000 euros y de 9.9% para aquellos que lo
superen.
Como bien se sabe, Chipre es un país considerado como
paraíso fiscal, debido a su poca transparencia en su sistema financiero y
refugio de capitales rusos especialmente, de grandes oligarcas y mafiosos
que “lavan” dinero en los bancos de la isla.
Sin embargo, no todo está dicho puesto que el parlamento
debe aprobar el acuerdo con prontitud este fin de semana. Se espera un
acalorado debate por lo que sería un evidente acto confiscatorio. Es como si
los depositantes fueran responsables solidarios de los malos manejos de la
banca. Por otra parte, el Presidente ya ha hecho claro su manifiesto que si no se aprueba el rescate en la forma y condiciones impuestas, sería el colapso de Chipre ya que dos principales bancos entrarían en bancarrota el próximo martes, con el consecuente pánico financiero.
Los cajeros ATM han dejado de funcionar e informan el descontento de la gente que enterada de la noticia han abarrotado agencias para
poder retirar su dinero.
Aunque para evitar el pánico fuentes de la UE han dicho que
esta medida no se replicará en Europa, nada puede asegurar el uso de medidas
extremas que perjudiquen a los más afectados por las crisis: los ciudadanos de a
pie. A esto hemos llegado.
¿Y quién dice que las cosas están arregladas en Europa?